Editor y empresario textil. En 1921, al retirarse su padre del negocio, asumió la gerencia de la firma Baygual y Lonch junto a su hermano Francisco (Sabadell, 1899-Granollers, 1936) y a Antonio Llonch Roca (Sabadell, 1869-1936). De ideología carlista, al iniciarse la Guerra Civil huyó a San Sebastián y allí colaboró en la edición de La Ametralladora y Pelayos. Fue también el primer editor de Chicos, revista dirigida por Consuelo Gil Roësset (Madrid, 1905-1995). Años después, fue presidente de Fomento de Prensa Tradicionalista, empresa editora del periódico carlista El Correo Catalán.