Representante de la línea clara, popular por su personaje Ray Banana y recordado por su participación en la serie Blake et Mortimer.
Thierry Benoit siempre fue un apasionado del cine y quiso dedicarse a hacer películas, de hecho se formó en el Institut des hautes études cinématographiques, aunque tuvo que conformarse con trabajar como asistente de realización en televisión.
También le atraía el cómic, como medio hermano que es del cine, y comenzó a escribir historietas, dibujándolas él mismo, sin dejar su trabajo en la televisión. Fue publicando cortos trabajos en cabeceras como Actuel y Echo des savanes, revista en la que determinó que historietista sería su oficio tras recibir el premio al mejor guión de 1979 en el festival de Angulema por su obra Hôpital (Les Humanoïdes associés). Ted Benoit, que así firmaba sus obras de cómic, tenía una deuda gráfica importante con Moebius y con Crumb, dado que sentía fascinación por el underground y la nueva historieta francesa que había despertado en Metal Hurlant, pero se mostró inquieto en cada siguiente obra que abordó, en busca de un formalismo sofisticado, como lo demuestra su obra Passage vers l'oubli.
Al poco tiempo depuró su forma de trabajar para ir acercándose más a estilos muy distantes del suyo inicial, al de Yves Chaland o al de Serge Clerc, por ejemplo. La razón para este cambio se hallaba en el fuerte impacto que le causó la obra de Joost Swarte, defensor de la llamada línea clara, a cuyo credo se rindió Benoit. Lo demostró con sus siguientes historietas, recopiladas en la serie de álbumes titulada Vers la ligne claire (o sea, "En busca de la línea clara") y con su personaje fetiche, Ray Banana. Este pastiche muy deformado del Quijote con las facciones de Clark Gable deambuló por las páginas de la revista (A suivre) y luego dio lugar a cuatro libros singularmente surrealistas en los que quedaba claro que lo que su autor quería era dibujar escenarios, objetos y modas de los años cincuenta, en un intento por capturar esa "estética Hergé" tan anhelada.
Otras obras suyas de importancia posteriores serían Bingo Bongo, de 1987, muy cerca del estilo de Chaland; L'homme de nulle part, de 1989, dibujado a cuatro manos con Pierre Nedjar; la broma experimental L'oeuf du mystère, de 2001; la adaptación de Raymond Chandler Playback, en 2004, que fue dibujada por François Ayroles, o la obra colectiva de 2009 A la frite sauvage, sobre guion único de Madeleine DeMille.
Hubo otras obras, colaboraciones e ilustraciones mil (alguna hizo para Cahiers du cinéma, por ejemplo), pero desde luego todo el mundo recordará a este autor por su participación en la saga de Blake et Mortimer. Benoit fue uno de los integrantes del equipo de dibujantes encargados del acabado de cada álbum de la alabada serie de Edgar P. Jacobs, labor en la que estuvo ocupado entre 1990 y 2002. En 1997 le concedieron el premio Alph'Art del público en Angulema por uno de los álbumes de esta serie, el 13: L'Affaire Francis Drake.
Su última obra de historieta publicada en vida apareció en 2014: el tercer libro protagonizado por Ray Banana, titulado La Philosophie dans la Piscine (edición de La Boîte à Bulles), con el que alcanzaba elevadas cotas de ironía narrativa que no se habían visto en el arranque de la serie.