VIII-1982 · Gijón · 
Ilustrador, portadista, entintador, divulgador… El asturiano David Lafuente es uno de los talentos españoles más versátiles de la industria del cómic. Con un estilo único, líneas limpias hasta el extremo y una capacidad narrativa inigualable, destacan en su bibliografía títulos como The Graveyard Book, de Neil Gaiman, Superman o, más recientemente, Radiant Red.
Nace en Gijón en agosto de 1982 y cursa estudios en la Escuela de Arte de Oviedo. Durante los años 1999 y 2000 sus primeros trabajos ven la luz en la revista Inteferencias, para verse publicado más tarde en el diario La Nueva España (Galipote, con guiones de Jesús Neira e Iván López) y la revista de comics El Gomeru (Love Explorer 6.0).
Con la editorial francesa Semic publica, bajo guiones de Lofficier, en la revista Yuma nº 10 (Le Dindon de la Force) y el Special Zembla nº 175 (La Chasse au Gromieux), ambas en 2003.
En 2005 aparece un número de la serie Quattrocento dedicado al autor asturiano, de la mano de Dolmen.
Tras algunas colaboraciones en la revista Dos Veces Breve, Los Reyes Elfos, de Víctor Santos y la obra Historias del olvido, pasa a trabajar para Marvel, como uno de los jóvenes valores con mayor proyección de futuro.
David irrumpió en la escena del cómic estadounidense en 2008, ilustrando la miniserie de Marvel Comics Patsy Walker: Hellcat, escrita por Kathryn Immonen. Más tarde, protagonizó el exitoso relanzamiento de Ultimate Comics Spider-Man junto a Brian Michael Bendis.
Entre los libros más recientes de David se encuentran Spider-Ham, Superman, Harley Quinn, la serie superventas de Image Comics Radiant Black, la nueva serie Radiant Red, nominada al Eisner y el cómic Knight Terrors: Batman entre los 10 más vendidos de 2023. Además, ha colaborado en la nueva serie Sinister Sons.
Lafuente también ha sorprendido recientemente con sus portadas alternativas para otros libros, incluida la serie ganadora del premio Eisner The Nice House on the Lake.
Ocasionalmente acreditado bajo el seudónimo Darko Lafuente, David es conocido sus lápices impecables y su dominio magistral de la tinta, tanto por los aficionados como por sus colegas artistas. No en vano, está considerado como uno de los narradores visuales con más talento de la industria del cómic estadounidense actual.
