Ron Smith siempre se sintió atraído por el dibujó pero fue obligado a estudiar ingeniería, estudios que cortó la II Guerra Mundial, en la que participó como piloto de Spitfire. Al finalizar el conflicto, en 1947 buscó trabajo en el estudio de animación británico Gaumont, de J. Arthur Rank, trabajando cortometrajes animados al estilo de Disney, como Animaland y Musical Paintbox. Tras la quiebra en 1949 de Rank Corporation, dueños del estudio, Smith vio su oportunidad para buscar trabajo en el ámbito del cómic y se dirigió a las oficinas de Amalgamated Press, donde consiguió su primer trabajo en las revistas Sun y Knockout.
En 1952 fue seducido por la empresa competidora DC Thomson, que le convenció y se mudó a Escocia para pasar más de veinte años dibujando todo tipo de historietas para este sello, que aparecieron publicadas en cabeceras como Adventure, Hotspur, Topper, Bunty o Judy. En 1976, creó King Cobra, el primer superhéroe de DC Thomson, que fue un gran éxito entre los lectores británicos.
Durante los años ochenta, se sumó al equipo de dibujantes de la revista 2000 AD, destacando dentro del quinteto principal de la serie Judge Dredd junto a Carlos Ezquerra, Mike McMahon, Brian Bolland y Steve Dillon. Fue posiblemente el más prolífico de los autores que dibujaron historietas en el universo Dredd, ya que no solo dibujó cómics del personaje en la revista, también para el periódico Daily Star, uno de los decanos de la prensa británica. También dibujó en otras series, como Rogue Trooper, Mean Team y Harlem Heroes.
Fue autor de las ilustraciones de algunos discos de rock, de grupos como Def Leppard o Sigue Sigue Sputnik, y también trabajó en Marvel UK, en series como Transformers, Zoids y Mask.
Se retiró tras sufrir un problema de visión y falleció aquejado de Parkinson.