EDITORIAL PARA TEBEOSFERA 2ª ÉPOCA, NÚM. 1. ESPECIAL ARGENTINA

Palabras clave / Keywords:
Editorial Tebeosfera/ Editorial Tebeosfera

TEBEOSFERA CONVOCA

Desde que en 2002 se identificó la blogosfera como un área aparte en el ámbito de internet y los ciberterritorios comenzó una revolución en los medios sociales en el seno de la propia red internet. El modo tradicional de ofrecer información y documentación se ha visto profundamente modificado y una oleada de usuarios que operaban en el mundo del conocimiento unilateralmente se convirtieron de repente, por arte de la democratización, en usuarios informadores. Entre los medios monopolistas creció el temor a la banalización y a la dispersión de la información. Además, se daba (se da) la circunstancia de que si bien este nuevo espacio de la comunicación es virtualmente infinito, parece que en él hay que ir abriéndose paso a codazos.
 
Lo importante es que ha cundido un sentimiento de libertad que convoca y agrupa a todos. Los nuevos receptores/informadores, los blogueroswikis, inflaman la actualidad con este grato sentimiento de libertad. Con el advenimiento de esta transformación de estructuras de la comunicación, no han tardado en querer demonizarlas los estamentos enraizados y descalificarlas con tono apocalíptico. No es cierto que la nueva distribución participativa de la red, los blogs, esté exclusivamente urdida por diarios autobiográficos de adolescentes exhibicionistas (lo decía J.L. Cebrián en su discurso en la RAE hace unos meses). Pero también es verdad que, debido precisamente al enorme número de focos informadores, con tiempo limitado a veces para incorporar su propia información, no existe una plataforma de trabajo conjunta, coordinada y estable. Por ejemplo, un sistema de ordenación y catalogación de nuestra historieta y de los tebeos. Siempre podemos aguardar a que miles de blogueros y foreros y wikis vayan entretejiendo una red de vínculos con información sobre la historieta y el humor gráfico, al albur de sus conocimientos (como ya se ha hecho y se está haciendo). La otra opción era hacer otra revolución, a la contra, con orden y reflexión, coordinando a un colectivo de estudiosos y divulgadores para obtener el mismo fin, bien que dirigido siguiendo una metodología concreta.
 
Eso hacemos en Tebeosfera. No deshojamos la actualidad, sólo la señalamos. No estamos a la última, reflexionamos sobre lo más reciente. No nos ceñimos a las modas, creemos importante recuperar lo olvidado. En dos meses hemos desarrollado una labor que hubiera sido impensable hace una década: revisar y corregir cientos de fichas de un catálogo inicial sobre nuestros tebeos; añadir más de ocho mil fichas de números de esas colecciones; incorporar decenas de artículos y reseñas sobre tebeos, con datos e imágenes rescatadas. Los visitantes distintos (distinta IP) que se han asomado en esos dos meses a Tebeosfera han sido: 17.000. El total de páginas visitadas, 222.349 a fecha de hoy. Solicitudes, más de dos millones.
 
Poco es. Empero, las visitas no son lo importante para nosotros. Esto no es un negocio ni un laberinto de jactancias. No necesitamos interdebates ni pretendemos inaugurar cibergéneros nuevos. Es apetecible, pero interesa más, urge más, ahora, recuperar el conocimiento / reconocimiento de este medio que amamos. Sin esa baza difícilmente podrá franquearse la muralla que la Cultura interpuso tiempo ha frente a las viñetas. Continuaremos por este camino mientras tengamos aliento, acaso satisfaciendo menos al aficionado que beneficiando al propio medio. Pues el medio es el fin en este caso.
 
Tras un número 0, así signado por razón de hallarnos todavía en periodo de formación, inauguramos un número 1 que debería satisfacer al interesado medio a la historieta. Hemos mejorado la estructura general, el funcionamiento de la base de datos, las hipervinculaciones y las secciones. En el lapso de dos meses (veteados, no lo olvidemos, por la indolencia de agosto) se han unido a nuestra empresa algunos colaboradores, que trabajan revisando fichas y aportando datos de relevancia y cuya labor es inestimable: Andrés Álvarez Pérez, Adolfo Gracia, Manuel Díaz Bejarano. Y también vamos acogiendo firmas de peso en el panorama historietístico nacional y mantenemos la necesaria vinculación con los temas de actualidad con ayuda de redactores como Antonio Santos, de verbo ágil y miradas propias, algo nada fácil de encontrar hoy (no obstante la atomización de la opinión aludida, que presuntamente genera variedad). Aún queda camino por andar, pero ya se ve una luz al final. Y esa luz está llena de promesas.
 
UN ESPECIAL DEDICADO A LA HISTORIETA ARGENTINA
 
Quizás pueda sorprender que hayamos escogido la historieta argentina como tema central para abrir este primer número de Tebeosfera. Es evidente que el interés general está enfocado hoy hacia las innumerables novedades orientales, la incesante calidad francobelga o los blockbuster estadounidenses, que no dejan de asomarse a la gran pantalla. Pero también queríamos hacer palmario que el medio evoluciona en todos los ámbitos y que el caso argentino, historietísticamente, ha sido uno de los fenómenos más interesantes en cuanto retroalimentación de fórmulas creativas.
 
El cómic en Argentina ha vivido un fenómeno de dualismo, perenne y progresivo, que ha afectado a todos los componentes de su estructura social -tanto a los vértices del mercado, como a los autores y su obra-, cercano a la paradoja de no ser por sus tintes mercantilistas, en este caso es causa y efecto, término y orientación). Dentro de los ámbitos de mercado observamos los primeros efectos de esta caracterización: por un lado, si bien no posee el protagonismo internacional de antaño –buena prueba de ello podría suponer la exposición argentina organizada por José Muñoz, presidente del jurado de Angoulême 2008, si comparamos las muestras y las retrospectivas de los años dorados con un panorama contemporáneo reducido a su mínima presencia-, sus autores nutren los más variados mercados con su compromiso laboral. El artista argentino se ha convertido en un valor seguro de cara a las editoriales de medio mundo. La máxima extensión de la filosofía del capital: el máximo rendimiento, a la mitad, o aún menos, del costo. Por otro lado, si, tras su estrepitosa caída, la industria editorial de la historieta argentina da muestras de cierto relanzamiento con el impulso de nuevas editoriales, no deja de ser producto de la buena voluntad de unos autores que prácticamente editan sin cobrar (el grueso de su producción se da en otros mercados que irónicamente, dada la crisis de su país, sí le reportan beneficios), o bien porque el autor novel está siempre ávido de ver sus páginas impresas al precio que sea.
 
Esta división, de ser asumida la premisa, debemos considerarla como longitudinal, nunca transversal, donde conviven una serie de composiciones de carácter más comercial, junto a otra más elevadas en tono e intención. Dos planos superpuestos dentro de la psique ecléctica de unos autores capaces de exaltar y de embellecer, al mismo tiempo, animados por la necesidad de un mercado en continua ebullición al cual han de adaptarse y plegarse para mantener las mínimas exigencias de su estatus. Este encadenamiento tendrá su último eslabón en un ideal artístico plural y amplio, pero no por ello menos populista. Los rasgos coetáneos dentro de este marco conceptual van de la mano del clasicismo “moderno” y “trasgresor”, aprendido de la historieta argentina más clásica (la referencia incuestionable), pero pretenden una libertad absoluta para crear y distorsionar las formas: la condensación conceptual y la complejidad en la expresión. El dinamismo de los creadores argentinos desea y crea una sensación constante de movimiento, de frescura, de rejuvenecimiento, a pesar de las dificultades de edición y autoedición de la década final del siglo pasado.
 
Tebeosfera asiste a la conformación del nuevo modelo de historieta argentino y quiere participar en la confección de su análisis interpretativo. Un estilo propio, de facetas multiformes en la composición minuciosa y detallada del buen hacer ornamental, decorativo y suntuoso, repleto de los contrastes de visiones distintas pero encadenadas dentro de un mismo marco ya sea teórico, ya sea, fundamentalmente, creativo.
 
Para ello hemos recurrido a los más doctos intérpretes de aquella historieta, doctores y universitarios de Buenos Aires y Córdoba e investigadores de otras localidades, que nos ceden lo mejor de sus trabajos. Laura Vazquez hace un repaso panorámico a la historieta de su país durante el siglo XX pendiente de las transformaciones en las industrias culturales. R.H. Von Sprecher nos cede todo su conocimiento sobre la obra y trayectoria de H.G. Oesterheld, el puntal más destacado de la historieta en su país. Andrés Accorsi nos ilustra sobre la etapa actual de Fierro, paradigma de la renovación de los cómics en Argentina. Javier Mora nos relata un viaje por la más rabiosa actualidad de los cómics argentinos. Lucas Berone reflexiona sobre la relación, aparentemente directa pero en discusión, entre literatura y cómic. Carlos R. Martinez nos invita a pasear por las calles de Buenos Aires de la mano de las viñetas. Además, entrevistamos a dos grandes autores: Carlos Trillo y Quique Alcatena, revisamos la publicación híbrida Cinemisterio y, para próximos días iremos publicando artículos sobre otros asuntos, como los nuevos autores de Fierro, los cómics de gauchos, Barreiro y su creación Bárbara, una completa revisión a la jugosa revista sobre historietas Sonaste Maneco y, aparte de otros muchos asuntos y publicaciones puramente argentinas, abriremos fichas sobre tebeos españoles que contuvieron obras procedentes de Argentina.
 
En cierto modo, ese concepto asociado a la historieta argentina, el del ‘héroe colectivo’ nos define: en Tebeosfera trabajamos alejados del espíritu personalista del blog con el fin de beneficiar a todos partiendo del trabajo de muchos. Quien desee unirse a este sueño que sepa que en esta caravana siempre hallará un hueco.
 
Participa, pues. 


 

Javier Mora, redactor jefe de Tebeosfera
(y coordinador de esta edición especial) 
Manuel Barrero, director de Tebeosfera.

Creación de la ficha (2008): M. Barrero y J. Mora Bordel
CITA DE ESTE DOCUMENTO / CITATION:
JAVIER MORA BORDEL, Manuel Barrero (2008): "Editorial para Tebeosfera 2ª época, núm. 1. Especial Argentina", en Tebeosfera, segunda época , 1 (16-IX-2008). Asociación Cultural Tebeosfera, Sevilla. Disponible en línea el 12/V/2024 en: https://www.tebeosfera.com/documentos/editorial_para_tebeosfera_2_epoca_num._1._especial_argentina.html