LAS MALDICIONES DE SOUICHI. HUMOR Y TERROR PARA TODOS LOS PÚBLICOS
FRANCISCO JAVIER LÓPEZ

Sección:
Resumen / Abstract:
Reseña del manga 'Las caprichosas maldiciones de Soichi', de Junji Ito / Review of Junji Ito's manga 'Las caprichosas maldiciones de Soichi'
Palabras clave / Keywords:
Junji Ito, Estudios sobre manga/ Junji Ito, Texts about manga
  • Portada de la edición española
  • Portada de la edición original
  • Anime 'Junji Ito Collection'

LAS MALDICIONES DE SOUICHI. HUMOR Y TERROR PARA TODOS LOS PÚBLICOS

 

El pasado año 2017 se cumplió el trigésimo aniversario del debut del creador de mangas Junji Itou. Especializado en historias de terror, este autor ha conseguido un gran éxito internacional y sus obras han sido publicadas en numerosos países, incluyendo España. Entre la amplia producción de Itou encontramos una multitud de relatos cortos que demuestran su talento para desconcertar y asustar al lector en apenas unas páginas. Si bien muchas de estas historias no guardan relación entre sí y suelen ser publicadas en tomos recopilatorios (tales como Itou Junji Kyoufu Manga Collection, Youkai Kyoushitsu, Ma no Kakera), Itou también ha creado historias más largas que se desarrollan normalmente a lo largo de dos o tres volúmenes (Uzumaki, Remina, Gyo, Black Paradox). También se ha atrevido con la adaptación de obras literarias, pues adaptó la famosa novela de Shelley en su Frankenstein y actualmente se encuentra serializando una versión en cómic de Ningen Shikkaku, obra maestra de Osamu Dazai titulada en español Indigno de ser humano. En su producción también encontramos obras en las que el humor, un elemento a veces presente en sus creaciones, cobra un papel más relevante, como es el caso de Itou Junji no Neko Nikki: Yon & Mu. Asimismo, Itou ha ideado a lo largo de su carrera varias obras que giran en torno a ciertos personajes originales, tales como la hermosa Tomie (una mujer fatal inmortal que siempre vuelve a la vida cuando es asesinada) o el que nos ocupa, el siniestro Souichi.

Souichi Tsuji es un niño de once años que vive en Fukazawa, una pequeña ciudad en una zona rural de Japón. Delgado, un tanto desgarbado y con una mirada desconcertante debido a que sus ojos parecen estar hundidos en su rostro, Souichi es sin duda la oveja negra de su familia. Mientras que sus dos hermanos mayores, sus padres y su abuelo son alegres, abiertos, simpáticos y saludables, Souichi parece ser todo lo contrario: antisocial, siniestro y enfermizo. Ello se debe no solo a su particular mirada y su palidez sino también a su excéntrica personalidad, pues Souichi está obsesionado con lo oculto, las maldiciones y lo terrorífico. Suele pasar el tiempo solo, encerrado en su habitación, en armarios o en sótanos, desde donde observa a los demás. También tiene la costumbre de murmurar y hablar entre dientes para sí mismo. Souichi dice padecer algún tipo de anemia y por eso suele llevar clavos en su boca, los cuales chupa para adquirir el hierro que necesita su cuerpo.

Este particular niño es el protagonista de varias historias de terror con elementos cómicos creadas por Itou durante los primeros años de su carrera. La mayoría de ellas[1] se encuentran recogidas en el volumen Souichi no Katte na Noroi  (que puede traducirse como “Las convenientes maldiciones de Souichi”), que fue publicado en Japón en 2011 por la editorial Asahi Comics y cuenta con 410 páginas. Se trata del tercer volumen de la compilación Itou Junji Kessaku-shu (“Colección de obras maestras de Junji Itou”) y recoge diez historias con una extensión de 30 a 50 páginas, generalmente. Esta obra ha sido publicada recientemente en España por la editorial ECC bajo el título Las caprichosas maldiciones de Soichi y dividida en dos volúmenes, de los cuales el segundo todavía no se ha comercializado.

Souichi apareció por primera vez en la historia “Tanoshii Natsu Yasumi”, publicada originalmente en 1991. En este relato el personaje es presentado desde la perspectiva de Yuusuke y Michina, dos primos lejanos que viven en Tokio pero se desplazan a Fukazawa para pasar unos días con sus parientes. Ambos están disfrutando de unas divertidas vacaciones de verano hasta que unos extraños accidentes empiezan a ocurrir a los recién llegados. Michina sospecha de Souichi, quien se muestra especialmente antipático y disfruta asustando a la niña, si bien ella al final será capaz de resistir su acoso. Según la entrevista a Junji Itou que encontramos en Itou Junji Kenkyuu (2017), una publicación de la editorial Nemuki que celebra y analiza la obra del autor con motivo de su trigésimo aniversario como mangaka, Souichi iba a ser inicialmente el protagonista de una única historia, “Tanoshii Natsu Yasumi”, pero la insistencia de su editor y la positiva acogida del personaje entre los lectores hicieron que volviera a aparecer en sucesivas historias cortas.

Así, aunque en las siguientes entregas encontramos una conexión directa con esta primera historia (principalmente debido a la presencia de los primos de Souichi o personajes relacionados con ellos), Itou pronto empieza a diversificar la temática de las historias y a profundizar en el personaje de Souichi. En este sentido, resulta destacable el modo en que Itou muestra un nuevo aspecto relacionado con Souichi en cada capítulo. Ya sea cambiando la víctima de sus maldiciones y odios (que van desde sus primos lejanos hasta su hermano mayor pasando por profesores y compañeros del colegio) o el punto de vista desde el que se narran los relatos, en cada historia descubrimos un nuevo detalle de la personalidad del siniestro niño o sus habilidades terroríficas. Estas variaciones sobre el patrón habitual de cada capítulo contribuyen a que la lectura del volumen completo no resulte repetitiva y hace que el lector se “encariñe” con el personaje.

Así, también es interesante el modo en que Souichi va desempeñando diversos roles narrativos en los episodios. Al principio comienza claramente como el oponente de los protagonistas, quienes sufren sus maldiciones y deben encontrar un método para librarse de ellas o para desenmascararlo, pues el muy ladino siempre oculta sus intenciones con mentiras. Conforme se avanza en el volumen observamos que Souchi empieza a ocupar un rol más protagónico y ello nos permite descubrir nuevos aspectos de su personalidad como el profundo vínculo que tenía con su extraña abuela, a quien se parece y quien mimó demasiado al crío; su carácter resentido, pues no perdona ninguna afrenta; o su visión megalómana de sí mismo, ya que está convencido de ser superior a los demás y, en el fondo, busca que su círculo cercano reconozca sus capacidades. Finalmente, en algunos de los capítulos vemos a Souichi en el de rol de víctima, ya sea de sus propias estratagemas o porque se ve amenazado por un personaje más terrorífico de lo que él hubiera imaginado (el dueño del bosque donde clava las muñecas para sus maldiciones o una modelo increíblemente alta y de apariencia atípica). Sin duda, estos momentos contribuyen a generar humor a partir del clásico recurso de “el cazador cazado”.

Las habilidades “sobrenaturales” de Souichi también se diversifican a lo largo de los capítulos. En las primeras historias el personaje se vincula a la tradicional forma de maldecir en Japón conocida como ushi no koku mairi y por eso aparece clavando muñecas en un árbol en mitad de la noche con algunas velas en su cabeza. Así, en las páginas del cómic también podemos ver cómo es capaz de hacer vudú construyendo muñecos similares a la persona que desea maldecir, de dotar de vida a muñecos de tamaño humano capaces de suplantar a sus modelos, de escupir con fuerza los clavos que siempre lleva en la boca o incluso usarlos como colmillos para aparentar que es un vampiro. Más adelante vemos que Souchi tiene la capacidad de influir en las mentes de las personas y manipular lo que piensan, de construir disfraces o utilería (props) propios de una película, e incluso invocar el espíritu de los fallecidos. Si bien estos poderes resultan temibles y es en su mostración cuando Itou nos ofrece las viñetas más terroríficas y desconcertantes, siempre queda la duda de si realmente Souichi posee dichas habilidades. Es decir, Itou nos deja caer en varios capítulos que Souichi no usa más que trucos y mentiras para sugestionar a las personas de su alrededor de modo que no es realmente una entidad diabólica sino un crío sombrío con mucha imaginación y malas intenciones.

Las historias cortas protagonizadas por Souichi permiten observar ligeramente la evolución estilística de Junji Itou, puesto que la primera historia recogida en este volumen es de 1991 y la última de 1995. Considerando que su carrera comenzó en 1987, podríamos decir que estos cómics pertenecen a una primera etapa en su trayectoria. Las primeras historias del volumen que nos ocupa presentan un dibujo limpio con predominio de líneas sencillas y un ritmo narrativo más bien homogéneo. No obstante, conforme vamos leyendo las historias posteriores, notamos que el dibujo se vuelve más elaborado al presentar viñetas más detalladas caracterizadas por el uso de tramas, un ritmo visual más complejo (los primeros capítulos pueden resultar un tanto aburridos en comparación con los últimos) y un mayor número de imágenes grotescas mostradas en viñetas de gran tamaño. A pesar de esta ligera evolución dentro del volumen, este cómic es plenamente representativo del estilo artístico de Itou, el cual se caracteriza por mostrar personajes y escenarios realistas, una organización visual muy cinematográfica, y personajes, monstruos o fantasmas bastante perturbadores. En cierto sentido, el dibujo de Itou es elegante y refinado, similar incluso al del shoujo manga, especialmente a la hora de plasmar a sus heroínas, todas ellas delgadas, hermosas y expresivas. Pero esta belleza formal, que invita a la lectura simplemente por su atractiva estética, se combina con páginas dedicadas a mostrar seres horrorosos. Quizás este contraste, además de la habilidad de Itou para recrear expresiones de sorpresa, terror o angustia, sea la clave del éxito de este maestro del terror.

Si bien el apartado gráfico de Las maldiciones de Souichi agradará a los fieles seguidores de Junji Itou, quizá no queden especialmente satisfechos con la estructura narrativa de los relatos y el número de escenas terroríficas. Es decir, la apreciación o recomendación de esta obra puede variar en función de las preferencias de los lectores aficionados al cómic de Itou. Quienes prefieran historias puramente terroríficas y desconcertantes, tales como las que aparecen en la saga de Tomie, quizás encuentren los capítulos de este cómic un tanto decepcionantes y carentes de emociones fuertes o impactos visuales. Aquellos que disfruten de los relatos en los que abunda el humor, como El diario gatuno de Junji Ito, probablemente reciban con mayor agrado este volumen. En concreto, quizá sea recomendable para aquellos lectores que busquen iniciarse en la obra de Itou pero son demasiado jóvenes o demasiado asustadizos.    

La obra de Junji Itou ha tenido una buena acogida internacional y prueba de ello es que en España se han editado recientemente muchas de sus obras. Planeta editó Uzumaki allá por el 2004, La Cúpula nos trajo Tomie en 2006 y, tras varios años sin apenas presencia en España, en los últimos años las editoriales Tomodomo y ECC han apostado con éxito por los cómics de Itou. Se trata, sin duda, de una excelente oportunidad para acercarse a las perturbadoras, terroríficas y a veces cómicas historias surgidas de la mente y la pluma de Itou, si bien el cómic no es el único medio para ello ya que algunos de los personajes e historias más populares de Itou han dado el salto al medio audiovisual. Por ejemplo, las historias de Tomie han dado lugar a una saga cinematográfica de películas de terror compuesta por nueve entregas (aunque la mayoría de ellas son francamente olvidables e innecesarias) y Uzumaki fue adaptado en el año 2000 en un film “delirante” pero poco terrorífico. En 2012 apareció Gyo, la primera adaptación animada de un cómic de Itou, y hace apenas unas semanas se estrenó Junji Itou Collection, una serie de animación de doce episodios que adaptará diferentes historias del autor. El primer episodio está dedicado a Souichi, un personaje al que Itou parece tener cariño y con quien ha confesado sentirse identificado.

 

NOTAS

[1] Otras historias de Souichi han aparecido recogidas en tomos recopilatorios tales como Yami no Koe o Shin Yami no Koe – Kaidan.

TEBEOAFINES
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Creación de la ficha (2018): Francisco Javier López Rodríguez · Edición de Félix López
CITA DE ESTE DOCUMENTO / CITATION:
FRANCISCO JAVIER LÓPEZ (2018): "Las maldiciones de Souichi. Humor y terror para todos los públicos", en Tebeosfera, tercera época, 5 (23-I-2018). Asociación Cultural Tebeosfera, Sevilla. Disponible en línea el 14/XII/2024 en: https://www.tebeosfera.com/documentos/las_maldiciones_de_souichi._humor_y_terror_para_todos_los_publicos.html