MANGA CON EMOCIÓN. ENTREVISTA A HENAR TORINOS
FÉLIX LÓPEZ, HENAR TORINOS, MANUEL BARRERO

TEBEOSFERA. ¿Qué es la historieta para ti?

HENAR TORINOS. Siempre he considerado la historieta como la unión de lo que más me gustaba de pequeña: dibujar y escribir historias. Para mí es el arte más completo, que implica una mezcla de todos ellos. Un buen historietista, aun sin ser guionista, ha de ser un buen contador de historias, saber narrar y transmitir emociones mediante el dibujo.

Proceso creativo de una página de Mala Estrella, del boceto inicial al dibujo final.

T. ¿Qué es lo mejor y lo peor del cómic?

H. T. Para mí, lo mejor es ver que el fruto de tu trabajo ha llegado a la gente, que has podido transmitir el mensaje que querías por medio de los dibujos. Dentro del proceso de creación, lo mejor sin duda es el momento en el que empiezas a madurar una idea, el diseño de los personajes, los bocetos de la historia.

Lo peor es quizás la gran cantidad de horas que has de sacrificar para llegar a la meta. Los dibujantes de cómic somos gente muy solitaria (con esto no quiero decir que seamos poco sociables, sino que pasamos mucho tiempo solos trabajando) Una vez alguien me dijo que le gustaba ver a los dibujantes coincidir en las ferias de cómic, cómo se reían y hablaban entre ellos, porque era consciente de que durante el proceso de creación estaban muy solos. Pero al menos estamos haciendo lo que nos gusta.

T. ¿Qué diferencia hay entre el cómic de hoy y el de antes, cuando no había democracia, según tú?

H. T. Supongo que la diferencia principal es la libertad a la hora de expresarse. Antes era complicado o imposible crear una historieta que no fuera de humor o aventuras, ya que tratar temas más serios o delicados estaba fuera de lugar. Creo que es por eso que aún hoy en día el mercado de cómic español se centre casi exclusivamente en el cómic humorístico o paródico.

T.  ¿Uno nace con estilo o el autor debe formarse?

Muestra de Aunque tú no lo sepas.

T. ¿Hubo algún proyecto que siempre quisiste hacer y no hiciste?

H. T. Trabajé durante muchos años en un proyecto de cómic titulado Aunque tú no lo sepas, un manga más costumbrista que trataba de una joven que viajaba por Latinoamérica en busca de ella misma. Fue mi primer proyecto y el que me preparó técnicamente para enfrentarme a los siguientes.  Espero que algún día ese cómic salga a la luz, porque la verdad es que le tengo mucho cariño.

T. Tú has elegido un género del cómic para expresarte. ¿Por qué esa elección?

H. T. Realmente no soy fan de usar un solo género para las historias, tanto para hacerlas como para consumirlas. Lo importante es el contenido, el género es sólo algo orientativo. Puedes disfrutar igual de un cómic humorístico que de uno de aventuras.

T. Pese a todo, hoy hay bastante interés por las historias intimistas, ¿por qué?

H. T. Porque son historias con las que cualquiera nos sentimos identificados, y curiosamente a la gente le hace mucha gracia el ver reflejadas en viñetas escenas que él mismo ha vivido. También puede ser por la evolución de la sociedad: antes nos evadíamos con historias de guerreros, hadas, superhéroes, ahora queremos ser nosotros los protagonistas.

T. Hay muchos aficionados al cómic que nunca leen manga, o que jamán consumen superhéroes, o que… ¿Por qué tanta diferencia en las apetencias lectoras?

H. T. Es cuestión de gustos, por lo que tampoco puedo obligar a nadie a leer manga. Pero también pienso que hay que ser abiertos en relación a las historias que nos puede ofrecer un tomo estilo manga. Como en todos los estilos, hay material muy bueno y material muy malo. Hay tomos manga con los que uno puede tirarse horas admirando una viñeta.  Es cuestión de darle la oportunidad, saber mirar más allá del estilo.

	Ilustración inspirada en la canción Las Feuilles Mortes de Edith Piaf.

H. T. Me gusta mucho leer, sobre todo novelas de todo tipo de géneros. Mis favoritas son las de terror y suspense. Soy más de ver series que películas.

T. ¿De los medios de comunicación existentes en la actualidad, cuál hubieras elegido para trabajar aparte del cómic?

H. T. Ahora mismo trabajo en diseño gráfico, videojuegos e ilustración editorial. Con los tres me siento bastante cómoda por ser, al fin y al cabo, derivaciones de lo mismo: la creación gráfica. Hoy en día uno de los mercados que ofrecen más salidas a un artista es el mundo de los videojuegos, sean para consolas o para móviles, debido a la gran demanda y a las nuevas tecnologías.

T. ¿A tu entender, qué medio se asimilaría más al cómic?

H. T. Como dije al principio, se trata de contar historias con imágenes y palabras. El cine es lo más parecido al cómic; de hecho, los storyboards que se utilizan en las películas no distan mucho de lo que sería una historieta.

T. Como autora, ¿preferirías ser una best seller o una autora “de culto”?

H. T. La verdad, es una difícil elección… quizá preferiría un punto intermedio. La idea de ser un best seller es tentadora, pero no a costa de hacer un producto excesivamente comercial y sin alma. También existen los best sellers alabados por los críticos más exigentes.

T. Hablando de la crítica, ¿sirve para algo?

H. T. Hay dos tipos de críticas: la constructiva y la destructiva. La constructiva sirve para mejorar, darte cuenta de cosas que no haces del todo bien (siempre las hay). La destructiva no sirve para absolutamente nada.

T. ¿Para qué sirven los festivales de cómic?

H. T. Sobre todo para ponerte en contacto con gente de tu mismo gremio, aprender y comenzar proyectos en común. Según qué festivales, también es buen momento para contactar con editoriales, pero aquí en España eso no se da tanto como en otros países.

T. Si usas herramientas electrónicas, dinos qué técnicas tradicionales has decidido no utilizar. ¿El uso de las nuevas modifica la creación o el mensaje de la obra?

	Mala Estrella en formato digital, tanto para iPad como en formato ebook para PC y libros electronicos.

Veo el uso de las herramientas electrónicas como lo que es, sólo una herramienta más que no tiene por qué influir en el mensaje o resultado final. Es sólo una forma de llegar a donde tú quieres. Una historieta bien  construida no va a cambiar por el hecho de estar realizada en tinta, óleo o acuarela, al igual que no cambiará por estar hecha digitalmente.

T. El cómic digital se prevé como un naciente mercado, pero… ¿cómo crees que se debería regular?

H. T. Fomentando la venta de ebooks. De hecho, la editorial con la que ahora trabajo quiere apostar por la distribución digital de cómics y novelas, y me parece una idea con mucho futuro. Se trata de ofrecer al lector una opción con la que disfrutar de un cómic que existe en papel, pero que puede adquirir más barato en su formato digital.

T. Dibujar sobre tableta aporta limpieza al acabado, ¿también velocidad? Dinos cómo construyes una página estándar.

H. T. Una vez te acostumbras a entintar con la tableta, que quizá sea lo más difícil de conseguir, es mucho más rápido. Sobre todo porque te ahorras tener que escanear y limpiar la página, amén de que tiene el famoso "ctrl z".

Para las páginas, lo primero que hago es realizar un storyboard en pequeño donde voy viendo cómo colocar las viñetas según la narración. Es la única parte del proceso que hago a lápiz, porque me resulta más cómodo de ver. Una vez hecho esto, paso la idea al ordenador, encajando las viñetas con la tableta. A partir de aquí lo paso a limpio “a lápiz” en color azul, para después entintarlo y añadir las tramas.

T. Por favor, háblanos de tus influencias, que seguro que hay dos o tres autores que te chiflan.

	Muestra de "Noria Skybar" para el fanzine SupeinGO!

T. ¿Podría decirse que ya hay una “corriente” de manga español, o a la española, o bien el manga sólo es una modalidad de creación, un estilo?

H. T. Un poco de las dos cosas. Para mí, el manga es simplemente un estilo, con determinadas características: un determinado tipo de historias, un determinado look (generalmente en blanco y negro con tramas) y una forma determinada de narrar. Como en todos los estilos, existen corrientes. No es lo mismo el Renacimiento español que el italiano, aunque tengan muchas cosas en común. Igualmente, nunca será lo mismo el manga japonés que el que sea haga en España o en Estados Unidos, simplemente porque en Occidente tenemos una forma diferente de narrar e historias distintas que contar.

En este sentido creo que en España ya hay mucho material disponible como para que empiece a considerarse una corriente, aunque todavía le queda camino por recorrer.

T. ¿Qué tiene Mala Estrella de ti?

H. T. ¿El personaje o el cómic?

Si es el personaje, poco tiene de mí. Quizá tenga mal carácter, pero no llego a esos extremos.

Si se refiere al cómic… en Mala Estrella, casi sin darme cuenta, he plasmado todos mis ideales, mi forma de ver la vida, mis creencias y la evolución de las mismas. Y digo sin darme cuenta porque en realidad fue una historia que se me planteó de forma muy espontánea. Al principio no tenía muy claro lo que quería hacer, quizá por eso me dejé llevar.

T. Has imaginado un futuro en el que reina la amoralidad. ¿Lo ideaste así para hacer alguna analogía o sólo es un escenario?

H. T. La analogía es evidente. Aunque en ningún momento de la historia se sabe si es realmente nuestro mundo o uno paralelo, da a pensar que podría tratarse de un futuro no muy lejano. Desde un principio quise dejar eso en el aire, que cada uno se imaginara lo que quisiera. Eso también me daba algo de libertad a la hora de crear el argumento, tampoco quería hacer un cómic de género histórico.

Imagen promocional de Mala Estrella.

H. T. Ja ja ja, lo cierto es que nunca pretendí que Mala Estrella fuera considerada una heroína, y menos una diosa… pero sí que es verdad que no es una mera asesina, quise dejar claro que hay algo más.

T. Narras con mucha agilidad, tanta que parece que a veces emana de los ánime. ¿te gusta la animación oriental?, cuál?

H. T. He visto muchísimo ánime y me encanta, aunque considero que mi forma de narrar bebe más de las películas y series occidentales. El ánime en ocasiones me resulta lento y confuso, aunque me gusta su forma de realzar las cosas nimias, las emociones, con escenas que parece que no sirven para nada pero que le dan mucha riqueza.

Me encanta Evangelion aunque reconozco que a veces me resulta incomprensible. One Piece, Black Lagoon, Read or Die, Nana, Canaan, son algunos de mis favoritos. Ahora estoy viendo Blood y me está gustando bastante.

T. Dale un buen consejo a una autora que quiere empezar ahora.

H. T. Lo más importante es la perseverancia, el llevar la historia que quieres contar hasta el final. Desgraciadamente, un cómic no es algo que tarde dos días en hacerse. Requiere muchísimo trabajo y muchísimas ganas de estarse horas y horas sacando páginas adelante. Cuando por fin lo has conseguido, la alegría que se siente es inmensa, pero el proceso es duro.

También es importante innovar. Para hacer historias de niñas de instituto japonés ya lo hacen los japoneses muy bien, no necesitamos hacer nosotros lo mismo. Ahora que el manga español empieza a ser algo, tenemos que marcar la diferencia.

T. Háblanos de lo que te traes entre manos hoy mismo y dinos cuándo sale

H. T. Ahora mismo trabajo en el segundo tomo de Mala Estrella, que si todo va bien saldrá a finales de 2011. A la vez estoy trabajando en otros proyectos, pero todavía no tengo fechas oficiales.