Certamen que mezcla teatro, danza e ilustración (con la entrega de un fanzine creado a propósito para la actuación), con dirección, coreografía e interpretación de Silvia Balvín; música e interpretación de Alberto Almenara; dramaturgia de Alberto Cortés; iluminación de Benito Jiménez; ilustraciones y diseño de fanzine de Adara Sánchez y Cristian Pineda (textos del fanzine de Elisa Victoria Marroquí).
EL EQUIPO DE ROSA CERDO VUELVE A REUNIRSE PARA PRESENTAR EL QUE, POR EL MOMENTO, SERÁ EL TERCER TRABAJO LIDERADO POR LA BAILARINA Y COREÓGRAFA SILVIA BALVÍN, OTRA DE NUESTRAS FRANCOTIRADORAS ENPEÑADA EN ROMPER LAS FRONTERAS Y LOS GÉNEROS ESCÉNICOS.
La Balvín se multiplica; incluso antes de que terminase sus estudios de danza en el Conservatorio y en el Centro Andaluz de Danza (Sevilla), ya había formado su propia célula de trabajo bajo el nombre de Rosa Cerdo. No es una compañía, ni un grupo de danza, sino algo más en consonancia con sus amplias inquietudes; ella lo define como un colectivo, y es que, dado lo singular de un trabajo como el suyo, que bebe de diferentes fuentes artísticas para darle cauce en sus propuestas, no hay otra manera de definir a esta célula que, con hovering, llega al tercer capítulo de su historia para salas teatrales.
Pero decíamos que se multiplicaba y, dada su afiliación con “el colectivo”, realiza espectáculos para espacios singulares, colabora con las producciones de La Ejecutora -destacable su trabajo en Las dependientas- y baila, como hemos podido comprobar, con coreógrafos y coreografas como María Cabeza de Vaca, Teresa Navarrete, Juan Luís Matilla o artistas como Miguel Marín y Alberto Cortés. A todo se atreve, como con la instalación-performance que realizó Karen Harvey en Brooklyn.
HOVERING DANZA Y MÚSICA EN DIRECTO CON LA PARTICIPACIÓN DE TRES ILUSTRADORES QUE APOYAN EL ESPECTÁCULO GRÁFICAMENTE.
Diálogo interdisciplinar como ampliación de perspectivas sobre la idea de partida; hasta el fanzine formará parte de la pieza… la Balvín sigue contaminando los lenguajes.
El centro en torno al que orbitará la pieza, de forma muy libre, es el significado del verbo “to hover” (“cernirse” en inglés), abarcando sus diferentes acepciones y las acciones a las que se refieren: mantenerse en suspensión; permanecer en un lugar fijo en el aire batiendo las alas como las aves; permanecer en un lugar de forma nerviosa e inestable; encontarse en estado de indecisión.
Con estos elementos y una música, inspirada en las bandas sonoras de las películas de terror de finales de los setenta y principios de los ochenta e interpretada por Alberto Almenara, Silvia escribe su nueva pieza para proyectarse hacia el futuro.