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LA SEMILLA DEL DRAGÓN. ENTREVISTA A MATEO GUERRERO.


Entrevista de Manuel Barrero, celebrada en octubre de 2005 por correo electrónico.

 

 

 

 

 

 

 

[ Cubierta del primer número de DragonSedd, obra de Guerrero, Reyes y Jiménez. Haga clic para ampliar, así como sobre el resto de imágenes de esta página y siguientes. ]

 Entrevista dividida en dos partes. Leer parte:    1     |    2     

Tebeosfera- El primer volumen de DragonSeed se presenta a principios de 2006, en el festival de Angulema, publicado por Humanöides Associés. Un español más en la corte del gran editor. ¿Crees que la representación española en el extranjero da fe de la calidad de la historieta española?

Mateo Guerrero- Pues si, después de mucho tiempo vuelvo a hacer lo que más me gusta en este mundo, que es contar historias a través de viñetas. Y para mi es un orgullo poder hacerlo en una editorial en la que trabaja tanto “GIGANTE” como es Humanoides.

La calidad de los autores españoles esta más que contrastada. Salvo en Japón, tenemos autores referenciales en los grandes mercados. Pacheco, Ferry y Larroca en América son autores de los grandes. Aparte de toda a legión de autores que llevan años allí ganándose la vida. Y en Francia, donde estamos representados de una forma tan brillante como lo estamos ahora con Guarnido. Aún así, creo que hay muchos autores españoles que no están trabajando en proyectos de la altura que les correspondería por su nivel de calidad. Pero con esto no voy a descubrir nada que no sepamos ya.

La verdad es que en los cómics, el caso es diametralmente opuesto al fútbol en España. La “selección Española” podría ser un verdadero DREAM TEAM. Imaginaos una editorial con Juanjo, Carlos, Pascual, Salvador, Ramón Bach, Bleda, Carlos Giménez, Munuera…

2.- Hablemos de tus inicios. De La Línea de la Concepción, en 1976, al Saló del Còmic de Barcelona, en 1995. ¿Qué pasa durante todo este tiempo?

Pues eso, Mucho tiempo. ¿Cómo empecé? Todo los dibujantes comentan que se recuerdan a sí mismos toda su vida dibujando… Yo puedo presumir de acordarme del primer día que cogí un lápiz. Recuerdo cómo en la guardería, vino la “seño”, me puso un lápiz en la mano, y guiándomela ella, empezó a recorrer el papel… ¡…DETRÁS DEL LÁPIZ QUEDABA UNA LINEA QUE FORMABA UNA IMAGEN! Y mi vida fue distinta desde entonces, de verdad.

Después, con unos quince años, tuve la GRANDISIMA SUERTE de poder conocer a Carlos Pacheco. Él vive a unos 8 Km. de mi pueblo natal, La Línea. Yo sabía que quería dibujar tebeos, pero no sabía cómo se podía conseguir eso. Todo resultaba muy lejos desde el Sur del Sur. Y un día, me presenté a un concurso de cómics organizado en San Roque. El único concurso al que me he presentado en mi vida. Y me hablaron de un tipo que había allí, que trabajaba para “los americanos, esos de Batman y La Masa”.

El resto fue cuestión de insistencia. Mi principal virtud. Conseguí el teléfono de Carlos, y fue muy amable de recibirme en su casa. Estaba dibujando el segundo número de Dark Guard… Dios mío… que maravilloso era aquello que estaba viendo… esos lápices… Y me di cuenta de que yo dibujaba en folios finos A-4 y con lápiz de la escuela y goma Milán… y así no era como trabajaba aquel monstruo que había conocido. Me quedaba mucho por aprender.

¿Qué más pasó? Pues conocí a Aure –que es diez años mayor que yo y por lo tanto de otra generación comiquera- y pronto empezamos a trabajar juntos. Él dibujaba antes, le pedí que si me podía entintar una pagina a lápiz y desde entonces hasta ahora. Y también nos hicimos amigos, Jose Mª Reyes, Alberto Foche y yo. Todos los días, más o menos, quedábamos para tomar café, charlar de tebeos y enseñarnos dibujos. Yo tendría 16 ó 17 años, empecé a publicar con 18 y ya tengo 29. Se puede decir que no ha ido mal la cosa.

 3.- Tu primer trabajo fueron tres historietas para Otaku. Desde entonces, buen rollo con Norma, quienes probablemente traduzcan aquí DragonSeed. ¿Pero por qué has publicado tan poco con ellos?

Pues es simple. La situación del mercado en España es la que es. Hemos estado varias veces muy cerca de trabajar juntos pero al final, por una cosa u otra… No obstante, todo el trabajo que hice para El País, fue a través de ellos coordinado por Óscar Valiente.

 4.- Poder hacer, de entrada, una serie limitada supongo que sería todo un lujo en su día. Me refiero a Zeón. El llanto de los dioses. Háblanos de tu experiencia ‘profesional’ en Camaleón y de las razones por las cuales quedó inconclusa Zeón.

Pues si que fue todo un lujo. Recuerdo aquellos días como un tiempo de una ilusión tremenda. Es lo que yo llamo la “época de la inocencia” por mi parte. Creía que podría hacer más de lo que hice. Y por supuesto, cometí unas novatadas tremendas. Lo que recuerdo con más cariño de todo aquello, es el trato con la gente de Camaleón, que no eran editores, eran “coleguitas”. Y aquello terminó porque vi muy claro que aquello no llevaba a ningún lado.

Empecé a publicar cuando estaba estudiando primero de ingeniería técnica, carrera que dejé para ponerme a dibujar cómics –en mi bendita inocencia-. Al año siguiente me matriculé en psicología por la UNED, para simultanearlo con mi trabajo haciendo Zeón… Ni que decir tiene que ni aprobé Psicología –en realidad no toqué un libro-, ni acabé nada como dibujante. Así que al final de curso, después de un año trabajando, y ver como se retrasaban las salidas de los tebeos y todo eso, decidí tirar la toalla.

He de decir que de Zeón, publiqué dos tebeos, pero que el tercero estaba acabado a lápiz cuando decidí cortar la serie. Había cometido muchos fallos como creador y era el momento de replantearse cosas.

Crónicas de Mesene, de Planeta-DeAgostini

Crónicas de Mesene, de Planeta-DeAgostini

Crónicas de Mesene. Cantares, de Dude

Crónicas de Mesene. Cantares, de Dude

Crónicas de Mesene. Cantares, página

León, obra inédita

León, obra inédita

León, obra inédita

 5.- De ahí a Laberinto, otro sitio donde se cobraba ‘no mucho’… Trabajas con Roke González y con Aure. Algunos te acusaron de ‘neofitismo’ entonces, o de seguir demasiado al dictado Record of Lodoss War...

¡Pues claro que era un neófito! Todos lo éramos, más o menos. Pero eso sí, yo tenía las ideas muy claras. Sabía que uno de los principales fallos de Zeón era la narrativa, así que decidí centrarme en ese aspecto. Por eso contacté con Roke, que me dio un argumento  y manga ancha para entrenar el storytelling. Se puede comprobar como en el primer tebeo no intento hacer ninguna virguería gráfica. Quería aprender a narrar, y por eso cambié el estilo en gran medida. Después fue el trabajo lo que me fue dando tablas. Le puse un grandísimo cariño a aquella serie y creo que se nota. Y tuve, quizás, la mejor relación profesional con alguien que se pueda tener, con Roke. Aprendimos a saber cada uno lo que el otro quería en la obra.

Otro dato, es que como decía antes decidí plantearme mi vida. La situación era clara. Yo no tenía nivel suficiente para ganarme la vida como dibujante, porque no era suficientemente bueno. Así que empecé a estudiar magisterio, lo cual me daba un margen de tres años para mejorar y a la vez sacarme una carrera. Y para aquello me venía muy bien Laberinto y Mesene. Yo sacaba apenas 55.000 ó 60.000 pelas por tebeo a lápiz. Y ahora, quien quiera, que nos juzguen a los que empezamos en Laberinto de hacer algo poco “profesional”. 

 6. Las crónicas de Mesene se mudan a Dude Cómics. ¿Pensabas que en Dude podrías desarrollarte mejor como autor?

Pues Dude empezaba. Y yo no conocía a ningunos de los editores de aquello. Pero el elemento determinante fue que presentamos una continuación a la serie de 7 números y Planeta-DeAgostini no estaba por la labor de publicarla así.

Toni Guiral ya no era el editor. Y todo fueron peros a partir de entonces. He de decir que según me dijeron en la editorial, el Mesene de Planeta fue una de las series que mejor se vendió de Laberinto. Y yo no comprendía aquello. No querían publicar 7 tebeos; aceptaron llegar a 6, siendo el último de 32 paginas. Parecía que había que recortar algo a la fuerza. Y si algo he sido yo siempre, es cabezota.

El guión de Roke era muy bueno desde mi punto de vista. Lo mejor que había escrito. Así que localicé el número de Jorge Iván, lo llamé y él me ofreció, además de los siete números, el sacar un especial con mapas, relatos y demás, que fue El mundo de Mesene. Y así salió aquella serie que pudimos leer entonces.

 7. Se aprecia gran progresión en tu narrativa de unas crónicas de Mesene a otras, pero aunque comienzas León, no sigues con la saga. Y eso que, por lo que tenemos entendido, tu Mesene fue uno de los cómics más vendidos por Dude. ¿Por qué lo dejas?

Simple. Cobraba 60.000 pesetas por tebeo a lápiz. Y aunque las ventas fueron muy buenas –para España-, los royalties no y a mí no me suponía dinero apenas. Vamos, que me llegó ese momento en el que tuve que decidir qué hacer con mi vida otra vez. Había terminado Magisterio y llegó el momento de buscarse la vida. Y como se comprenderá, con poco más de 60.000 pesetas cada mes y pico, sin seguro social, no se puede vivir.

De León llegué a hacer medio tebeo, cuando ya estaba haciendo otras cosas. Tenía y tengo, unas ganas tremendas de poder afrontar el mejor guión que Roke me hizo nunca. Pero la realidad es la de que un alquiler es mucho más caro que lo que se paga por un tebeo en España. Aquella etapa fue muy bonita, no obstante. Y conservo como amigos a toda la gente con la que trabajé de alguna manera.

 8. Aunque el género es el mismo, la fantasía (si bien creo que querías hacer una historieta sobre fútbol), cambias el registro con Cazadores en la Red.

Se empezó haciendo unas entregas juveniles, para terminar haciendo algo infantil. Para mí supuso un rápido proceso de aprendizaje, pues hasta entonces siempre había trabajando bajo las mismas normas gráficas. Aquí tuve que cambiar. La verdad, aquella fue una experiencia a la que no le saqué todo el jugo que podía. Una experiencia que no me importaría repetir.

 9. Resultó muy atractivo el proyecto publicado en El País, primero con Isidro Sánchez y luego con Joseph Busquets como guionistas. Luego tú tomaste las riendas del guión. ¿Y aquel libro con guión propio que comenzaste a elaborar?

Se acabó porque en el periódico cambiaron el formato del suplemento, reduciéndolo a una quinta parte, y ya no les cabían esas dos páginas semanales. Me remitieron algún e-mail de chavales de menos de diez años que les gustaba la serie y que querían dibujar. No os podéis imaginar lo tierno que me pareció aquello. Y después estuvimos a punto de hacer un álbum juvenil, basado en la serie, pero con un esquema más complejo.

Yo hice el guión y dibujé diez páginas de aquello. Estoy bastante orgulloso del material que hice, pero por lástima, no se pudo acabar. Creo que hubiese sido un material que hubiese gustado bastante. Era divertido. No quisiera que pase mucho tiempo hasta que veáis cosas mías escritas de nuevo.

Estas cuatro páginas, simples o dobles, pertenecen al proyecto para Norma Editorial titulada Cazadores en la red

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 [ © 2005 Manuel Barrero, para Tebeosfera 051230 ] [ Todas las fotografías y dibujos han sido cedidos por Mateo Guerrero ]