Formada en artes, Aki Shimizu comenzó su carrera en 1995 como ilustradora de revistas y diseñadora de personajes para videojuegos. En el ámbito del manga comenzó en el año 2000, con Kumo no Graduale. Dos años más tarde, ya se hizo cargo de una serie como autora completa, Qwan. Visto su potencial, le propusieron la adaptación al cómic de un videojuego, el exitoso Suikoden, y de ahí surgió Gensou Suikoden III: Unmei no Keishousha.
Otros trabajos suyos fueron: Ikyou no Kusa ~ Sangoshi Rensaku Shuu, en 2006; Mouryou no Hako, en 2007; Hyakki Tsurezurebukuro, en 2009; Kyoukotsu no Yume, en 2010; Ubume no Natsu, en 2013; Tortoise Delivery, 2013; Jorougumo no Kotowari, 2015; Tesso no Ori, 2017; Hinatsugimura, 2017; Chuuzenji-sensei Mononoke Kougiroku: Sensei ga Nazo wo Hodoite Shimau kara, en 2019, y otras.