Pintor, dibujante e ilustrador, español de nacimiento, emigrado a la ciudad cubana de La Habana, se trasladó en el año 1961 a Ciudad de México en donde desarrollaría toda su carrera profesional.
Destacó como portadista, alcanzando notoriedad y reconocimiento en las colecciones de EDAR (Editorial Argumentos), para la que realizó las inolvidables portadas de la colección Lágrimas, Risas y Amor, así como las de Fuego.
Anteriomente había trabajado con Cervantes Bassoco ilustrando las cubiertas de Tawa, el Hombre Gacela, encargándose también de ilustrar una colección de cromos que se obsequiaba con esta publicación.
Realizó las ilustraciones de los libros de texto de Ciencias Naturales que utilizaban los escolares de primaria mexicanos de los años setenta y ochenta del pasado siglo XX.
Su hijo, Luis V. Rey, fue también un destacado ilustrador, especializado en el "paleoarte".