El sello editorial belga Le Lombard nació con este nombre en 1946, fundado por Raymond Leblanc para la distribución de la revista Tintin, el pilar sobre el que se asienta, aunque ha publicado muchos más títulos, que han venido a definir el en su conjunto el catálogo mundial más coherente sobre la llamada "línea clara".
Cuarenta años más tarde, la casa editorial pasó a denominarse les Éditions du Lombard tras la fusión empresarial que tuvo lugar en 1986 con el grupo Média Participations, que también acogió a sellos como Dargaud y Dupuis, pero que en todos los casos mantuvieron su independencia como empresas. Pese al cambio de propietarios y de denominación, muchos se refieren al sello simplemente como Lombard.