Decimoctavo volumen de la serie que como álbum se publicó por primera vez en francés en 1972 con el título original de Les lauriers de César. Durante una cena en Lutecia en casa de su cuñado, el jefe Abraracúrcix se emborracha y presume de que sería capaz de servir un estofado condimentado con los laureles de la corona del mismo Julio César. A pesar de considerarlo un disparate Astérix y Obélix se desplazan a Roma para intentar conseguirlos.